En el lugar de Maserfield, posteriormente llamado Oswestria en su honor, en la región de Shropshire, en Inglaterra, san Osvaldo, mártir. Siendo rey de Northumbria se hizo ilustre por las armas, pero, más inclinado a la paz, propagó con decisión la fe cristiana en la región y, en un combate contra los paganos, fue muerto por el odio de éstos contra Cristo.
Rey de Northumbría, desterrado con los suyos cuando era niño a tierra de scotos, abrazó el cristianismo y fue bautizado en Iona, Escocia; al ser rey intentó recuperar su trono y derrotó a los galeses del rey san Cadwalladr Fendigaid cerca de Hexham, recobró su reino que lo puso bajo el signo de la cruz; sobre el paisaje que después se llamaría "campo del cielo". Quiso restaurar el orden en todos sus dominios e implantar el cristianismo.
Llamo a los santos Aidán y Birino para que evangelizara a su pueblo sajón. A san Aidan le concedió la isla de Lindisfarne para su sede episcopal. San Beda dice de él que era "prodigiosamente humilde, humano y generoso para con los pobres"; se casó con la hija del primer rey cristiano de Wessex. Su reinado duró ocho años. Logró unir bajo su mando a todos los pueblos de Bretaña, con sus cuatro lenguas: el británico, el píctico, el irlandés y el anglosajón. Tuvo que enfrentarse con Penda, rey pagano de los mercios, y en la batalla de Maserfelth murió derrotado; según la tradición espiró encomendando a Dios a las almas que morían con él en Gloucester. El vencedor hincó su cabeza en un poste y allí permaneció un año entero.
Muy pronto fue venerado como santo y mártir. Antiguamente se veneraba a san Oswaldo como héroe nacional de Inglaterra, y su culto se popularizó en Escocia, Irlanda, Portugal, el norte de Italia, Bohemia, el sur de Alemania y Suiza. El santo es el patrono de Zug, en Suiza. Su culto ha decaído un tanto, pero todavía se celebra su fiesta en varias diócesis de Inglaterra.
Rey de Northumbría, desterrado con los suyos cuando era niño a tierra de scotos, abrazó el cristianismo y fue bautizado en Iona, Escocia; al ser rey intentó recuperar su trono y derrotó a los galeses del rey san Cadwalladr Fendigaid cerca de Hexham, recobró su reino que lo puso bajo el signo de la cruz; sobre el paisaje que después se llamaría "campo del cielo". Quiso restaurar el orden en todos sus dominios e implantar el cristianismo.
Llamo a los santos Aidán y Birino para que evangelizara a su pueblo sajón. A san Aidan le concedió la isla de Lindisfarne para su sede episcopal. San Beda dice de él que era "prodigiosamente humilde, humano y generoso para con los pobres"; se casó con la hija del primer rey cristiano de Wessex. Su reinado duró ocho años. Logró unir bajo su mando a todos los pueblos de Bretaña, con sus cuatro lenguas: el británico, el píctico, el irlandés y el anglosajón. Tuvo que enfrentarse con Penda, rey pagano de los mercios, y en la batalla de Maserfelth murió derrotado; según la tradición espiró encomendando a Dios a las almas que morían con él en Gloucester. El vencedor hincó su cabeza en un poste y allí permaneció un año entero.
Muy pronto fue venerado como santo y mártir. Antiguamente se veneraba a san Oswaldo como héroe nacional de Inglaterra, y su culto se popularizó en Escocia, Irlanda, Portugal, el norte de Italia, Bohemia, el sur de Alemania y Suiza. El santo es el patrono de Zug, en Suiza. Su culto ha decaído un tanto, pero todavía se celebra su fiesta en varias diócesis de Inglaterra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario