En la ciudad de Belén, en Tierra Santa, beata María de Jesús Crucificado (María) Baouardy, virgen de la Orden de las Carmelitas Descalzas, que, colmada de carismas místicos, unió la vida contemplativa con una singular caridad.
Miriam Baouardy nació en Abellyn o I'billin (Cheffa-Amar, Galilea, Palestina) en el seno de una familia greco católica melquita. Tuvo una infancia y una juventud muy difícil, se quedó huérfana muy pronto, y un tío suyo la recogió trasladándola a Alejandría de Egipto, donde tuvo que huir de la casa de su pariente porque la querían casar en contra de su voluntad, cuando contaba 13 años, además la trató como una sierva. Pidió a un musulmán, que enviase una carta a su hermano Boulos, pero éste en un momento de furor religioso, porque no quería abrazar el Islam y convertirse en su segunda mujer, la hirió gravemente en el cuello con una cimitarra y, dándola por muerta, la envolvió en un gran lienzo y la abandonó fuera de la ciudad.
Curada milagrosamente por María que se le apareció en sueños, se puso a servir primero en Alejandría, después en Jerusalén, en Beirut donde sirvió a la familia Atallah, que le propuso trabajar con su hija en Marsella. Llegó a Marsella donde después de cuatro días de éxtasis ingresó en las Hermanas de San José de la Aparición en 1865; pero como sufría fenómenos místicos, entre ellos la estigmatización, no la admitieron la profesión en 1867, porque la consideraron más apta para la vida contemplativa que para la activa.
Posteriormente, sería recibida como hermana lega en el Carmelo de Pau y allí tomó el nombre de María de Jesús Crucificado; en 1870, fue enviada como cofundadora del Carmelo en Mangalore en la India; allí pronunció su profesión religiosa en 1871 y... le siguieron los fenómenos sobrenaturales que le crearon más problemas, con su director espiritual el vicario apostólico Efrén M. Garrelon, que lo consideraba diabólico. Volvió a Pau, y la expulsaron del Carmelo, no sin antes colaborar en la fundación del convento de Betarram para el servicio de las carmelitas; pero ella decidió fundar el Carmelo en Nazaret a pesar de la negativa del patriarcado de Jerusalén, y... lo consiguió, aunque tuvo la aprobación después de su muerte. Sor María era analfabeta, pero tuvo expresiones de fuerza y de lirismo: "No puedo ya más. El amor me abrasa, me consume, me quema. Mi corazón se funde, se derrite... El mundo duerme, todo duerme. Vayamos a despertarlo. Soy como un pájaro prisionero en la jaula. ¡ábreme la puerta para volar hacia Ti!". Murió en Belén de una grangena, después de haber profetizado su muerte. Su corazón le fue extirpado y enviado al Carmelo de Pau. Su médico descubrió que estaba traspasado por una lanza.
Conviene resaltar que María fue beatificada por el papa Juan Pablo II el 13 de noviembre de 1983, el mismo día que también beatificaba a una mujer judía: Edith Stein. ¡Una árabe y una judía, beatificadas el mismo día!.
Miriam Baouardy nació en Abellyn o I'billin (Cheffa-Amar, Galilea, Palestina) en el seno de una familia greco católica melquita. Tuvo una infancia y una juventud muy difícil, se quedó huérfana muy pronto, y un tío suyo la recogió trasladándola a Alejandría de Egipto, donde tuvo que huir de la casa de su pariente porque la querían casar en contra de su voluntad, cuando contaba 13 años, además la trató como una sierva. Pidió a un musulmán, que enviase una carta a su hermano Boulos, pero éste en un momento de furor religioso, porque no quería abrazar el Islam y convertirse en su segunda mujer, la hirió gravemente en el cuello con una cimitarra y, dándola por muerta, la envolvió en un gran lienzo y la abandonó fuera de la ciudad.
Curada milagrosamente por María que se le apareció en sueños, se puso a servir primero en Alejandría, después en Jerusalén, en Beirut donde sirvió a la familia Atallah, que le propuso trabajar con su hija en Marsella. Llegó a Marsella donde después de cuatro días de éxtasis ingresó en las Hermanas de San José de la Aparición en 1865; pero como sufría fenómenos místicos, entre ellos la estigmatización, no la admitieron la profesión en 1867, porque la consideraron más apta para la vida contemplativa que para la activa.
Posteriormente, sería recibida como hermana lega en el Carmelo de Pau y allí tomó el nombre de María de Jesús Crucificado; en 1870, fue enviada como cofundadora del Carmelo en Mangalore en la India; allí pronunció su profesión religiosa en 1871 y... le siguieron los fenómenos sobrenaturales que le crearon más problemas, con su director espiritual el vicario apostólico Efrén M. Garrelon, que lo consideraba diabólico. Volvió a Pau, y la expulsaron del Carmelo, no sin antes colaborar en la fundación del convento de Betarram para el servicio de las carmelitas; pero ella decidió fundar el Carmelo en Nazaret a pesar de la negativa del patriarcado de Jerusalén, y... lo consiguió, aunque tuvo la aprobación después de su muerte. Sor María era analfabeta, pero tuvo expresiones de fuerza y de lirismo: "No puedo ya más. El amor me abrasa, me consume, me quema. Mi corazón se funde, se derrite... El mundo duerme, todo duerme. Vayamos a despertarlo. Soy como un pájaro prisionero en la jaula. ¡ábreme la puerta para volar hacia Ti!". Murió en Belén de una grangena, después de haber profetizado su muerte. Su corazón le fue extirpado y enviado al Carmelo de Pau. Su médico descubrió que estaba traspasado por una lanza.
Conviene resaltar que María fue beatificada por el papa Juan Pablo II el 13 de noviembre de 1983, el mismo día que también beatificaba a una mujer judía: Edith Stein. ¡Una árabe y una judía, beatificadas el mismo día!.
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